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Sophie Okonedo con Paul Rusesabagina y su mujer Tatianna © Peter Brooker/Shutterstock

Blog

La película 'Hotel Rwanda' y el genocidio de 1994

Por Manu Mediavilla (@ManuMediavilla), colaborador de Amnistía Internacional,

La película "Hotel Rwanda", basada en hechos reales, nos transporta a los sucesos desgarradores que tuvieron lugar en en 1994.

En Ruanda se desató una de las más horrendas oleadas de violencia, cobrándose la vida de casi un millón de personas a manos del Movimiento Nacional Republicano para la Democracia y el Desarrollo (MNRD), junto con su brazo extremista juvenil, los Interahamwe, y su aliado la Coalición para la Defensa de la República y sus juventudes. Estos actos fueron acompañados por represalias perpetradas por el Ejército Patriótico Ruandés.

Las secuelas del genocidio y la guerra de 1994 siguen siendo palpables entre las personas supervivientes que siguen enfrentándose a traumas profundos.

El Hotel Rwanda, cine por los derechos humanos

El cine intentó contribuir en 2005 a los esfuerzos de reconciliación de la sociedad ruandesa al detener su mirada en el 'Hotel Rwanda', película que constituye un auténtico testimonio a favor de los derechos humanos. Amnistía Internacional valoró entonces la valiente apuesta cinematográfica por poner de actualidad el genocidio y el valioso ejemplo de solidaridad del personaje que inspiró el film, Paul Rusesabagina, gerente del Hotel des Milles Collines de Kigali que en 1994 salvó la vida de más de 1.200 tutsis al darles refugio. Tres nominaciones a los premios Oscar (por dos interpretaciones y el guion original) reforzaron el prestigio de la película.

Como declaró Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional en España, "deben hacerse películas como ésta por el emocionante testimonio de solidaridad que nos ofrecen, y también porque nos ayudan a recordar una de las mayores crisis de derechos humanos de la historia moderna, en un continente especialmente castigado por la pobreza y el VIH/SIDA. Desde Amnistía Internacional creemos que el cine puede ser una herramienta poderosa para que el mundo tome conciencia de este tipo de conflictos y actúe a favor de los derechos humanos”.


Pero la historia tuvo posteriores capítulos para el personaje real, Paul Rusesabagina, que se marchó del país en 1996 y fue elevando el tono de sus críticas al gobierno del Frente Patriótico Ruandés. En 2006 fundó el opositor Partido de la Democracia en Ruanda (PDR-Ihumure), y en 2018 cofundó el Movimiento Ruandés por el Cambio Democrático (MRCD), coalición de grupos de oposición que presidía cuando fue detenido en 2020.>

El opositor y activista de derechos humanos, con ciudadanía belga y residencia en Estados Unidos, sería arrestado en Kigali y acusado de terrorismo junto a otras 20 personas en relación con ataques armados cometidos en el sur de Ruanda en 2018 y 2019 y atribuidos a las Fuerzas de Liberación Nacional (brazo armado del MRCD) en los que murieron nueve personas. En septiembre de 2021 fue declarado culpable y condenado a 25 años de cárcel.

Amnistía Internacional denunció múltiples violaciones del derecho de Rusesabagina a un juicio justo: arresto con falsos pretextos, traslado ilegal a Ruanda, desaparición forzada, detención en régimen de incomunicación, negación inicial del derecho a representación letrada de su elección,confiscación de documentos jurídicos con información privilegiada y confidencial...

Finalmente, el 25 de marzo de 2023 fue liberado tras un indulto del presidente ruandés Paul Kagame, y pocos días después pudo volver a reunirse con su familia en Estados Unidos.

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